Tenía
ganas de ver esta película, a pesar de no ser muy fan del estilo francés. Quise
verla por la temática, por hablar de una película sobre amigos y también sentía
curiosidad por ser la película más taquillera en francia. Lo cierto es que no me
ha decepcionado.
La película comienza con un hombre y un accidente de moto, despues de un
plano secuencia increíble de un París despertando. Un grupo de amigos van a
verle al hospital y, a pesar de su gravedad, deciden seguir con el viaje que
tienen programado como tradición un año más. Con el recuerdo del amigo como
telón de fondo, cada uno de ellos esconden pequeñas mentiras que , si
bien no parecen tener importancia, sí afectará a su relación con el
grupo. Al final, la auténtica verdad les tomará a todos por sorpresa.
Es una película sobre la amistad. Una temática, en mi opinión, poco explotada
en el cine, el de los amigos, con sus relaciones, sus aventuras y sus viajes.
Sus miedos y pasiones. Sus verdades y también sus mentiras. Supongo que pasa
como en la vida. Es preferible contar una historia de amor, con todos sus
remolinos y pasiones, sus sentimientos a flor de piel, sus tensiones y
miserias, donde la amistad queda relegada a un segundo plano, más discreto,
menos voraz, que hablar sobre un tema igual de universal, menos intenso pero en
mi opinión, más auténtico. Más legal. Hay un texto que habla sobre las
diferencias entre amor y amistad y, sin hacer de esto un manifiesto contra el
amor, (en todo caso, mas bien, sería a favor de la amistad) termina diciendo que
son cosas diferentes porque, al final, uno te da la vida y otro te da la muerte.
Ahí queda eso.
Y no es que en la película no haya amor. Lo hay, de los dos tipos, del amor
del verbo desear, en el que cada uno de ellos disfruta, o no, de sus relaciones,
(genial el momento pareja en casa de Marion Cotillard) y el amor del verbo
estimar, en su relación con cada amigo. Por eso me parece muy buena película,
(con la única salvedad de su duración) con la que en algún momento del film
todos nos hemos sentido identificados.
En cuanto a actores, están todos geniales. Pude verla en versión original
subtitulada, cosa que recomiendo, (me da pánico el doblaje que hasta la fecha,
han hecho a la pobre Cotillard en España) y disfruté de la química entre todo el
equipo. En especial destacaría a la misma Cotillard, que borda el papel
proporcionado por su marido, ( el director de la cinta, Guillaume Canet) y al
loco de Cluzet que enloquece aún más con la mentira revelada de su amigo Magimel
en uno de los momentos más simpáticos del film.
Si os gustan estos temas universales os lo recomiendo. Pasareis un gran
momento.