
No esperaba gran cosa de la película, y no me equivoqué. Repleta de esteriotipos ridículos trata el trillado tema de como las mujeres triunfadoras hacen malabalismos para compajinar su maravilloso trabajo en las altas esferas y el cuidado de sus hijos. Y yo me pregunto, ¿Donde están esos padres que todo lo hacen a las mil maravillas?.
Dejando al margen luchas entre los sexos, tampoco es que la película aporte gran cosa. Sarah Jessica Parker está, como siempre, haciendo el mismo papel que llevan años haciendo, solo que en esta ocasión lleva a dos niños bajo el brazo. Rodeada de actores que le dan algo de caché al film, aún así no consiguen que...